Mi mirada
Creo profundamente en que el cambio colectivo se gesta en el cambio interno de cada unx de nosotrxs.
Mi intención es cultivar y promover espacios de cuidado y de escucha profunda
Donde las personas a las que acompaño puedan tomar contacto con su mundo interno y puedan escuchar la voz que les lleva a transformarse, para crear una vida más amable para sí y su entorno.
Apuesto día a día por inventar nuevas maneras de relacionarnos, dónde la gratitud, el respeto y el cuidado sean motor.
Mi función es ser catalizadora de los procesos de cambio y promover la salud integral de las personas, ofreciendo espacios de autoexploración, nutrición e intimidad.
Siento que a nivel colectivo hay un movimiento cada vez más latente que apuesta por la calidad y la calidez relacional y mi compromiso es encuerparlo, habitarlo, para ser inspiración y quien quiera pueda unirse al movimiento.
ME GUSTA COCREAR MOMENTOS
Donde las personas puedan compartirse sin miedo y con naturalidad. Momentos de parada, de descanso, de juego y de complicidad, dónde ser espontaneas y dónde dar lugar a lo que sienten y lo que son aquí y ahora.
Trabajo con lo que hay, de forma sencilla y cercana, utilizando el humor y el amor como aliados en el encuentro terapéutico y poder así fluir y adentrarnos en aquello que necesitamos contar, observar o transformar. Me gusta trabajar desde el cuerpo, a través de técnicas de movimiento, respiración consciente y meditación.
Allá dónde estoy siempre hay espacio para lo sutil y lo simbólico, me gusta poder usar imágenes y metáforas sencillas que nos ayuden a comprender los procesos más abstractos o complejos y poder así vivirlos de una manera más simple.
Confío firmemente en el poder sanador y transformador que tiene el encuentro íntimo, ese lugar donde podemos expresarnos y ser con libertad. A lo largo de todos estos años acompañando y siendo acompañada, he comprobado que mostrarnos sabiendo que no hay juicio es una caricia para el alma y una experiencia que promueve el cambio y el amor popio.
Me gusta poder estar al otro lado, ofrecer una mirada cálida y atenta, que recoja y sostenga.
Me encanta acompañar, escuchar las vivencias de cada persona y lo que tienen para contar. Ofrecer un espacio donde puedan mirar su historia desde otros puntos de vista y así poder reelaborarla.
Facilitar espacios de aprendizaje, donde poder detectar tendencias, creencias, patrones y bloqueos y así poder conocerse y entender su funcionamiento, reconocer y aceptar cual es su manera de estar en el mundo y transformarla si así lo desean.
Ser testigo y acompañar otros caminos me nutre y me amplia
Me da permiso para ser, con mis luces y mis sombras, así como soy. Me siento muy reconocida en las historias que acompaño.
Acompañar me permite revisarme y actualizarme, mirarme con más amor y entender mi mundo interno y el que me rodea. Conectar me recuerda que es más lo que nos acerca que lo que nos distancia y eso me reconforta.
Tratar con cercanía y cariño, cuidar y escuchar otras vivencias, es algo que me hace bien y es lo que quiero ofrecer al mundo.
Apuesto por que podamos volver a lo humano, a lo que nos une.
Por ello en mi actuar diario trato de ser coherente con estos valores, observando con curiosidad y aceptando el movimiento auténtico y la libertad de cada ser.
Creo firmemente que entre todxs podemos amabilizarnos el camino, si cada unx de nosotrxs nos hacemos cargo y nos comprometemos con nuestro bienestar.
Para transformar nuestra vida es necesario comenzar desde dentro, ahondar en nuestro mar interno y recuperar nuestro poder.
Atrevernos, jugar, probar, cometer errores, aprender a vivir con liviandad los procesos, cuestionarnos, reirnos de nosotros mismos, salirnos del tiesto y reconocernos en cada una de nuestras facetas, nos gusten o no, forma parte del aprendizaje.
Es un regalo recibir a las personas que acuden a mí
Porque ya tienen dentro la semilla del cambio, han hecho una apuesta consigo mismas para transformar su vida y han escuchado esa voz que les impulsa a sentirse mejor.
Me encanta acompañar y potenciar ese amor a la vida, amplificar y alimentar ese impulso, darle espacio.
Si mis palabras te resuenan y quieres que trabajemos codo con codo
y te acompañaré encantada